1. Cuida tu preparación física y tu alimentación durante la semana. El Mar es un entorno exigente y tu cuerpo debe estar preparado y en perfectas condiciones.
2. Es muy recomendable federarse en algún club y realizar cursos de formación.
3. No salgas solo. Si no hay más opción y buceas en solitario es preferible contar con una persona de apoyo en la playa. Si esto tampoco es posible, indica a una persona el lugar exacto y la hora prevista de entrada y salida del agua.
4. Respeta las indicaciones según la meteorología. Con bandera verde no bajes la guardia, con bandera amarilla extrema las precauciones, con bandera roja no te metas en el agua. Si no hay bandera de color valora la situación con la escala Douglas: con marejada o fuerte marejada (olas de 0,5-1,25 y de 1,25- 2,50 metros) seguramente ya serán condiciones demasiado arriesgadas. Ten en cuenta otras cuestiones importantes como mareas, corrientes, presencia de medusas, etc.
5. Utiliza el equipamiento adecuado y revísalo antes de cada salida. Una boya de señalización es una medida de seguridad adicional: otras personas y embarcaciones podrán tenerte localizado y evitar una colisión. El traje de neopreno, capucha, escarpines, guantes, etc. te protegerán del frío del agua, pero también de cortes accidentales o picaduras inesperadas.
6. Conoce y respeta tus límites. Traspasarlos supone casi siempre abrir la puerta a algo desagradable para tí y para los que te quieren. Sé muy prudente.